No se me ocurre mejor forma de inaugurar este blog que contaros la labor que desarrolla la Asociación Pablo Ugarte en la lucha contra el cáncer infantil.
Conocí la Asociación Pablo Ugarte, la APU, como se la conoce cariñosamente, a través de una publicación de Facebook que mi amiga Bea compartió.
La publicación, hacía referencia a un microevento que una Apusocia muy activa había organizado en su casa: un mercadillo de ropa de segunda mano entre amigos (cada uno aportaba aquello de su armario que ya no se iba a poner y se la vendían entre ellos por un precio simbólico que iba destinado en su integridad a la APU). Además preparó un fantástico almuerzo, tartas incluidas cuyas porciones vendía a un euro; también para la APU.
Esa fantástica iniciativa, me gustó tanto que me metí en la web de la APU y cuando vi el trabajo que desarrollaban y la ayuda que proporcionaban a muchísimas familias con niños enfermos, esa misma noche me hice socia y desde entonces estoy enganchada a la APU.
